Cómo el cumplimiento de SAGRILAFT potencia la reputación empresarial
● Adoptar medidas efectivas contra el lavado de activos y la financiación del terrorismo preserva la reputación y credibilidad de la empresa, además de reducir los riesgos operativos vinculados a actividades ilícitas, previniendo posibles cierres de operaciones.
Bogotá, abril de 2024.- Hoy en día, la seguridad y transparencia son elementos esenciales para el desarrollo económico, siendo crucial que las empresas colombianas comprendan y apliquen las regulaciones pertinentes para prevenir prácticas ilícitas. Cesce, compañía aseguradora especializada en los ramos de crédito y cumplimiento, explica la importancia y los efectos de implementar el Sistema de Autocontrol y Gestión Integral del Riesgo de Lavado de Activos y Financiación del Terrorismo (SAGRILAFT).
El SAGRILAFT, regulado en el Capítulo 10 de la Circular Básica Jurídica de la Superintendencia de Sociedades, permite a las organizaciones identificar, evaluar, controlar y monitorear los riesgos asociados con el lavado de activos y financiación del terrorismo. Su objetivo primordial es evitar que las organizaciones sean utilizadas para actividades ilícitas, manteniendo la confianza del mercado y las autoridades.
Manuel Arévalo, Presidente & CEO de Cesce Colombia, explica que: “a través de esta herramienta, las empresas pueden detectar y mitigar los peligros asociados a actividades ilícitas mediante la adopción de medidas de control adaptadas a su perfil de riesgo. Al realizar transacciones con clientes, proveedores y demás terceros de la cadena de valor, contar con esta evaluación es un indicador de transparencia y garantiza la legitimidad de los recursos, evitando así problemas legales y de reputación que podrían afectar la estabilidad empresarial”.
¿Cómo funciona?
Una de las principales fortalezas del SAGRILAFT es su enfoque integral, ya que es recomendado para todas las empresas, pero sólo es obligatorio para las de mayor tamaño y para algunos sectores económicos más vulnerables a los riesgos LAFT (Lavado de Activos y Financiación del Terrorismo) Su metodología consta de cuatro etapas:
- Identificación de riesgos: implica reconocer y clasificar las fuentes generadoras, como contrapartes, productos, actividades y jurisdicciones, estableciendo metodologías para detectar amenazas asociadas, determinar condiciones y prioridades para la debida diligencia, y aplicar medidas para conocer y distinguir los factores de riesgo de manera efectiva.
- Medición o evaluación: se deben establecer metodologías para determinar la probabilidad de ocurrencia y el impacto, tanto a nivel individual como consolidado, frente a cada factor de riesgo identificado, incluyendo situaciones específicas, así como evaluar contratiempos al expandirse a nuevos mercados o introducir nuevos productos.
- Control: se implementan metodologías, como la creación de una matriz, para definir los mecanismos de evaluación adecuados de los factores de riesgo identificados, así como establecer controles y herramientas para detectar operaciones inusuales y sospechosas, reconociendo que a mayor riesgo se necesita un nivel de control más alto.
- Monitoreo: permite vigilar el perfil de riesgo y detectar operaciones inusuales y sospechosas, realizando seguimientos periódicos de eventos inherente y residual de cada factor, y desarrollando un monitoreo continuo para corregir deficiencias. Se garantiza la integridad y eficacia de los controles, además de asegurar que los riesgos residuales estén dentro de los niveles de aceptación establecidos por los directivos.
¿Cómo beneficia a las empresas?
● Protección de la reputación: adoptar medidas efectivas contra el lavado de activos y la financiación del terrorismo ayuda a preservar la imagen y la credibilidad de la empresa ante el mercado y las autoridades.
● Continuidad operativa: reduce los riesgos operativos asociados con el uso no autorizado de la empresa para actividades ilícitas, lo que puede resultar en el cierre de operaciones.
● Cumplimiento legal: cumplir con las regulaciones relacionadas con el lavado de activos y financiación del terrorismo es fundamental para evitar sanciones y elevadas multas por parte de las autoridades.
“Implementar un respaldo que brinde este nivel de transparencia y seguridad es clave para la competitividad y marca una diferencia en el mercado. A la hora de hacer negocios con cualquier otra compañía, el SAGRILAFT brinda tranquilidad frente a los clientes, proveedores y autoridades al asegurar que cuentan con un socio correcto y confiable, mejorando incluso la imagen del país. Contar con un especialista capaz de evaluar riesgos y realizar análisis exhaustivos de carteras es indispensable para asegurar la legalidad de los recursos empresariales. En Cesce proporcionamos servicios integrales que incluyen asesorías, charlas y contenido especializado para guiar a nuestros clientes en este aspecto vital para su empresa”, concluye Manuel Arévalo, Presidente & CEO de Cesce Colombia.